La indicación es clara, Dios y su rostro, el hombre. A ellos debemos amar, no es posible llegar al primero sin el segundo. Y la extensión también, a todos, siempre. El drama es que conocerlo no vale, el amor no es un conocimiento sino una práctica. ¡Desde luego, tarea tenemos! ¡Y como el amor es pasión, pues apasiónate! Un abrazo muy fuerte, buena semana